Secuencia lógica en la Transformación Digital del pequeño negocio rentable
Publicado el martes, 22 de mayo de 2018 a las 11:28
En nuestro último artículo os hablábamos de 3 fases diferenciadas en La Transformación del pequeño negocio rentable. Pero claro está, esto es solo el principio. Del sintagma (Transformación digital) a su estructura principal (visión, adaptación y transformación) y de esta, a una secuencia lógica.
PRIMERA FASE: VISIÓN
Todos sabemos que no empezamos nada, si no sentimos la necesidad de hacerlo. Es nuestro conocimiento el que nos lo dice. Si desconocemos algo, difícilmente pensaremos en ello. Tomemos pues el conocimiento como origen principal de cualquier transformación.
Necesitamos saber para después concluir y en su caso, hacer.
En esta fase, la persona, propietario y empleado, enfocan sus esfuerzos en entender de donde viene esta inercia y que papel juegan en ella el resto de las personas.
Por ejemplo sus clientes y sus proveedores.
1.- El propietario:
Sin duda, el propietario debe liderar la transformación digital de su negocio, del mismo modo que lidera el resto de los departamentos. Sin el, no se tomarán decisiones. Sin el, sus empleados no sentirán ese cambio como real y en consecuencia no empatizarán con ella. Es fundamental que el propietario sea el primero en adquirir cultura digital y aceptarla como ruta hacia su evolución para luego evangelizar esta idea dentro de su empresa.
Ahora bien, vivimos en la era de la información continua. Hay tantos datos en la red que resulta fácil infoxicarse para acabar no empezando nada.
Como primera recomendación podríamos mencionar la necesidad de borrar todos los datos que tenemos en la cabeza desordenados antes de empezar a entender.
También deberíamos crear una ubicación para esta inercia que hemos decidido implementar. Una carpeta nueva en el ordenador, un cartel colgado junto a la puerta de un despacho en la empresa… en definitiva, un gesto que nos recuerde que tenemos un nueva sección en la empresa y se llama Transformación Digital. Es una más, como: ventas, marketing, contabilidad, almacén, logistica, compras y tantas otras. Una vez aceptada esta evidencia, se está preparado para comenzar.
2.- Los empleados:
Por atrevido que parezca decirlo, es un hecho que el propietario, en su lucha individual, puede llegar a ser el peor enemigo de su marca.
Debemos tener en cuenta que por su edad, a la gran mayoría de propietarios y ejecutivos nos ha venido dado esto de La Transformación Digital. De pronto, a estas alturas, tras haber llegado hasta aquí con las estrategias heredadas de la era industrial, nos dicen que hay que cambiar.
Nuestro sistema de emergencia dispara un antiguo conocido, el miedo al cambio,
y alargamos los brazos para comprobar si aun tenemos controlada nuestra zona de confort.
Es la prudencia la que nos habla.
Este es un buen momento para recordar quienes somos, que nos llevó hasta donde estamos ahora.
¿Acaso fue prudente emprender?
No era más seguro un trabajo fijo en una buena compañía e intentar provocar promoción interna hasta que llegue la hora de la jubilación. Pues claro que era más seguro, de hecho, es la opción que escogen la mayoría de las personas. Tus empleados son perfectamente conscientes de que ser el jefe tiene un precio y entienden del mismo modo que trae sus beneficios. Lo entienden perfectamente y sabedores, tomaron la decisión de organizar su vida de otra manera. Eso si, esperan algo de su jefe, esperan atención, esperan sentir que aportan, esperan evolución, esperan colaborar, y también esperan promoción. En definitiva, hechos que les demuestre el talante de su jefe y saber que pueden ilusionarse con la idea de que la empresa prosperará, y con ella, ellos también. Así se consigue su complicidad inestimable, pues si alguien sabe lo que pasa en una empresa son los empleados y en consecuencia, si alguien puede aportar ideas de valor al propietario, son ellos.
3.- Los clientes:
El cliente sabe lo que quiere y estará encantado de contarte lo que podrías hacer para favorecerle, si le haces las preguntas adecuadas. A esto algunos le llaman co creación, otros economía colaborativa, el caso es que si les tienes en cuenta, si te enfocas en sus problemas y, en que puedes hacer para ayudar, pueden ser tus mejores aliados.
¿Acaso hay alguien mejor para decirte que quieren tus clientes, que ellos mismos?
Piensa en ti como cliente digital y lo verás super claro. No olvidemos que todos somos clientes, los empresarios también.
ADAPTACION:
Desde Netalian te proponemos una estrategia de adaptación y no de supervivencia frente al nuevo paradigma digital. No lo hagas solo, empleados y clientes son ahora tus mejores aliados
1.- El mercado:
Aquí están tus clientes, tus clientes potenciales, tus empleados y hasta tú. El mercado es el pueblo, el mundo. El mercado somos todos. Y ahi, están aquellos que comulgan con tus valores, con tu manera de hacer las cosas, esperando a que des con ellos.
Hoy en día nada está dicho, la gente está harta de un sistema ineficaz, harta de que les digan lo que tienen que hacer. Lo que quieren, es ser atraídos y después seducidos. Quiero honradez (para variar) quieren sentir que con cada compra que aportan algo a una buena causa, que al elegir una marca también eligen un modelo de conducta, quieren poder dejar claro en cada momento lo que piensan y lo que sienten. Son más humanos que nunca.
2.- La empresa:
“Con la iglesia hemos topado amigo Sancho”
Aquí se encuentra la caja de Pandora. De que funcione como un único engranaje depende el éxito de la misma.
Tengamos en cuenta que en esta nueva era, ningún empresario puede sentirse a salvo por sus contactos o por sus influencias, este chollo se ha acabado.
Ahora manda el cliente y punto.
El mercado es del pueblo, y son las personas las que deciden que quieren.
Todas a aquellas empresas que no empiecen ya a conectar con sus clientes, perecerán.
Los más grandes ya lo están haciendo, pero, ¿Cómo lo hacen los más pequeños?
3.- La estrategia:
Para entrar a diseñar una estrategia, ya se debe estar pensando en modo Transformación.
De nada sirven las acciones sin orden, sin foco, sin visión.
Inevitablemente se debe haber creado antes una visión clara de la situación y también haber completado un periodo de adaptación.
Cuando se tiene una cultura digital debidamente instaurada en la empresa y puesto a prueba en un obligatorio periodo de adaptación se está preparado para diseñar una estrategia.
Algunos puntos que indican que estás preparado:
La Necesidad de Transformación está presente en propietario y empleados.
Existe un mapa organizacional donde cada uno tiene claro su papel.
Se han creado mecanismos para compartir ideas.
Se han creado mecanismos para asegurar el estudio de estas ideas.
Se ha realizado un estudio de presencia digital de la competencia a nivel local, nacional e internacional.
Se ha diseñado claramente el perfil del cliente potencial
Se han fijado los caminos en apariencia más directos par dar con ellos.
Se ha creado una lista con los contenidos ideales para conectar con tu potencial cliente.
Todos nuestros proveedores están informados de nuestra iniciativa
TRANSFORMACION:
Este es el momento de implementar lo aprendido. No olvidemos que todo éxito nace de un fracaso. Hay que implementar, recabar datos, analizarlos, corregir, y volver a empezar. En una secuencia continua que alimentaremos constantemente y que ya no dejaremos de llevar a cabo.
1.- Comunica:
Activa tu nueva estrategia. Los datos y su análisis son tu mayor activo. Los resultados de estos constituirán el pilar de tu comunicación y conversión. Obtén una presencia sólida aportando valor y valores que atraigan.
Ahora vamos a preocuparnos de saber que herramientas digitales de todas esas que hablan son las que nosotros debemos utilizar. Web, redes, big data, emails, etc
No hay dos empresas iguales del mismo modo que no hay dos personas iguales.
Lo que si que hay son agentes de coincidencia entre ellas. Este es un buen momento para empezar a pensar en pequeñas alianzas que nos ayuden a prosperar más rápido.
Los grandes no lo necesitan y sin embargo lo hacen. Huelga decir lo importante que es para los más pequeños.
Para una nueva lógica se necesitan nuevas formas de comunicación. Con el conocimiento adecuado los pequeños pueden hacer lo mismo que los grandes.
2.- Datifica:
No es ningún secreto que a mayor cantidad de datos mayor capacidad de anticipación. Multiplica exponencialmente estos datos y en lugar de anticiparte, rozarás la precognición
3.- Analiza:
Los datos son el medio, pero sin un análisis acertado tras realizarlas preguntas adecuadas, no obtendremos éxito en los resultados. En la era digital, nada se deja al azar, se crea una métrica para cada acción.
Las máquinas poseen algoritmos que superan nuestra capacidad de analizar datos, pero no piensan por si mismas.
Si nosotros no les decimos que dato queremos ellas no sabrán que hacer.
En nuestro próximo artículo intentaremos poner valor a las acciones mínimas viables que un pequeño negocio rentable debe llevar a cabo para iniciar con garantías, su Transformación Digital.
22/05/2018 11:28 | _B98455